Autor: Gustavo Alberto Manzo Ugas (Abogado y Profesor Universitario de Derecho Constitucional, Política, Filosofía. Caracas, Venezuela)
La primera idea que surge con relación a la tradicional controversia izquierda y derecha es una en la cual buscamos podamos ubicarnos temporalmente y esto solo es posible tomando en cuenta el tiempo en el cual las ideologías nacieron y se desarrollaron. Esto es en sí mismo un objetivo aparte pues hay numerosas discusiones académicas con respecto al nacimiento de cada una.
Así que en un ejercicio arbitrario y por razones que no interesa profundizar, se ubica el nacimiento del liberalismo entre el siglo XVI y XVII y al socialismo en el siglo XIX con algunos antecedentes en el Siglo XVIII. Es decir que en términos de ciencia política puede afirmarse: “la ideología política liberal tiene no menos de 300 años y el socialismo al menos 200 años”, con lo cual también puede aseverarse: el liberalismo es al menos 100 años mayor.
Esta diferencia de edad trae consecuencias, ya que desarrollándose primero el liberalismo, es posible observar una especie de tope en su desenvolvimiento; al contrario el socialismo todavía no muestra haber llegado a un límite, al menos en LATAM. Esta hipótesis debe ser demostrada de manera científica para que sea más que una opinión. Sin embargo en LATAM si puede pensarse que el socialismo o la izquierda han encontrado un terreno fructífero en términos de captación y mantenimiento de seguidores políticos.
Algunos de los presidentes de tendencia Socialista son Lenin Moreno, Nicolás Maduro, Daniel Ortega, Evo Morales, Ramón Tabaré Vásquez, Laurentino Cortizo Cohen, Nayib Bukele, Andrés López Obrador, Carlos Alvarado Quesada entre otros, mientras que son de tendencia liberal: Martin Vizcarra, Iván Duque, Jair Bolsonaro, Mario Abdo Benítez, Mauricio Macri, Jimmy Morales, Juan Orlando Hernández.
Puede también pensarse que aun cuando América latina mantiene un equilibrio entre las ideologías políticas con acentos en la izquierda, además ha sido presa de las deformaciones producto del caudillismo, militarismo, y populismo pues la lista en estos renglones es abiertamente amplia lo que ha ocasionado severos atrasos e imposibilidad en la incorporación de sus sociedades a desarrollo y el avance. Los países con estas deformaciones en lo más reciente se reunieron creando una especie de eje (Ecuador, Nicaragua, Bolivia, Uruguay, Cuba Venezuela y Argentina) en torno al socialismo pero que ha perdido terreno, con lo cual se conformó otro eje (Brasil, Colombia Argentina) alrededor del liberalismo, dándose una respuesta de la derecha.
El eje de países en torno al socialismo recibió el impulso del fallecido Hugo Chávez y sede terrero con la salida de la era Kirchner y de Rafael Correa en Ecuador, aunque pareciera recuperarse con la llegada de López Obrador en México y una eventual vuelta del partido Unidad Ciudadana de Cristina Kirchner.
La Máxima expresión del eje en torno al socialismo ocurrió con el surgimiento de los pactos UNASUR (Unión de países del Sur) y ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) que venidos a menos en términos de relaciones internacionales, hacen ver a la Organización de Estados Americanos con mayor fuerza y representatividad respecto a la comunidad internacional y con suficiente independencia de las ideologías políticas que sus gobernantes sostengan.
Para el año 2019 se esperan varios procesos electorales que con seguridad introducirán alteraciones en el espectro de las relaciones geopolíticas; dentro de los temas que se van a mantener en el tapete giran en torno al éxodo de venezolanos en toda la región, que provoca desequilibrios económicos y estructurales importantes produciendo además iniciativas como la denominada “Grupo de Lima”, en la cual algunos países han hecho abstracción de las ideologías políticas de sus gobiernos, para calificar al régimen venezolano como autoritario y expresar su voluntad de aspirar una salida democrática frente a este proceso.
Otro tema que no se perderá de vista para finales de 2019 es el relacionado a la situación política de Nicaragua así como los problemas transfronterizos entre México y los Estados Unidos en torno a la inmigración.
De igual forma es posible que surja como tema relevante en la agenda el aspecto ecológico, y de otro lado, frente a las elecciones en los Estados Unidos, los hechos que provengan de ese acontecimiento.
En conclusión, teniendo en cuenta este balance, aun cuando las ideologías políticas parecieran no estar en los primeros puestos de la geopolítica, se mantienen como un factor que interviene en las decisiones de los estados para sostener o modificar sus opciones coyunturales.
Con el triunfo en las elecciones primarias argentinas del candidato adscrito a la formula Kirchner, se observa como el presidente de Brasil Bolsonaro, declara su intensión de salir del Mercosur, frente a un escenario adverso para quien opta por la reelección de Macri.
No obstante los argumentos esgrimidos hasta ahora, hay que señalar el papel jugado por China, con una línea socialista muy definida, aunada a Rusia no solo en el continente europeo, sino bajo la influencia que presta en varios temas de LATAM con lo cual no puede dejarse de lado esta reflexión: “La Guerra Fría no ha concluido, solo terminó una etapa pero ha comenzado otra”.
Por supuesto es importante no descuidar el foco, cuando nos referimos al componente ideológico (Socialismo/liberalismo), elemento sobre el cual se construyó una de las contiendas no bélicas más importantes de los últimos doscientos años. Es decir, aun cuando el decurso del tiempo y los acontecimientos hacen pensar que se ha recorrido un largo camino en cuanto a las ideologías políticas se refiere, lo cierto es que se siguen librando disputas y altercados que tienen centro en el punto principal de este artículo.
Se advierte que, habiendo surgido el liberalismo antes, las respuestas que ha brindado ante los temas gruesos planteadas por la vida moderna engranan en las premisas necesarias para avanzar en muchos sentidos, mientras que, los resultados que muestra el socialismo no son favorables en forma alguna.
(Las opiniones expresadas en este artículo pertenecen solo al autor y no reflejan necesariamente la política editorial y las opiniones de World Geostrategic Insights).